
Salí de mi atalaya cansado de hablar con Dios
Me fui directo al mercado donde vi a las burkas del Ramadan
Cargando frutas frescas agitando sus faldas con imágenes
De edificios y alucine que eran de Nueva York
Y que cada sacudida eran movimientos sísmicos y que estaban derrumbándose
En mi corazón
Pero ellas olían a frutas frescas
De dátiles salados y confituras de Arcángeles
Pero que fue de aquella que se largó hacia los campos
En extraña callejuela parlando lengua de botellas estrelladas
Ardiendo como un palo
En privadas conjeturas?
En antiguas herramientas en sánscritos inenarranable
Inmensas estampidas de lagartijas
Mujeres que me veían y yo las veía
Allí turbando los suelos
Negras como una gallina
Suaves sencillas
Plumas
Somáticas paradas en esa piedra ocupada
como si fuesen banderas que se izan al azar
Purísimas de pelvis purísimas de afuera
Purísimas de ayunos
Purísimas de mayo
Positivas
En negativo
Paseándose con estos ojos de perro que las mira
Una y otra vez
Como queriendo ser feliz
Rebasándolas en todo
Como un retrato
De tamaño desmedido
Como esta erección
Oh virgen mía?
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